Estrategia de diversificación

Equipo de Redacción Empresax
1 diciembre, 2017

Una de las estrategias de expansión o crecimiento empresarial que puede seguir cualquier compañía es la de diversificación. Supone la búsqueda de nuevas posibilidades comerciales o nichos de mercado, por lo que la empresa va a aventurarse en nuevos mercados y/o nuevos servicios o productos.

Esta apertura comercial en otras actividades a las realizadas hasta la fecha, provoca que la empresa opere en entornos competitivos nuevos, con factores de éxito diferentes a los habituales. Las dos vías habituales para llevar a cabo la diversificación son el desarrollo interno de negocios, o bien, mediante operaciones combinadas, como por ejemplo, una fusión o adquisición.

La diversificación es romper con el pasado. Es innovar. A corto plazo es arriesgar. En definitiva, supone un conjunto de cambios físicos y organizativos que afectan a la estructura de la empresa.

¿Cuáles son las principales razones para diversificar?

  1. Saturación del mercado actual

Cuando una empresa quiere o necesita crecer y no se pueden alcanzar los objetivos de crecimiento dentro del ámbito producto/mercado actual por la vía de la expansión. La diversificación en nuevos mercados constituye una vía de salida. Esta razón se ha dado recientemente en industrias agroalimentarias, que han empezado a exportar sus productos a nuevos mercados, como el asiático, donde hasta ahora eran poco conocidos.

  1. Reducción del riesgo global

Dice el refranero español que “no hay que tener todos los huevos en la misma cesta”. Efectivamente, una de las principales razones para emprender la estrategia de diversificación es la reducción del riesgo de la empresa en su conjunto. Aunque alguna de las actividades fracase, es difícil pensar que todas ellas evolucionen negativamente.

  1. Oportunidades de inversión

En ocasiones pueden surgir actividades que ofrecen interesantes niveles de rentabilidad, superior a nuestras líneas actuales.

  1. Recursos y capacidades excedentes

Desde un punto de vista de capacidad operativa, puede que no se alcance el nivel óptimo de uso regular y continuado de sus recursos (inputs) disponibles. De cara a optimizar los costes de los distintos procesos y conseguir un uso óptimo de los distintos recursos (humanos, financieros, tecnológicos, instalaciones,…) la empresa puede optar por una estrategia de diversificación y empleo de dichos inputs en nuevos productos o mercados.

  1. Generación de sinergias

Las sinergias surgen por el aprovechamiento común de recursos o por las interrelaciones estratégicas entre actividades. Esto ocasiona que el desempeño del conjunto de los negocios resulte mejor que el de cada uno de ellos por separado. Las sinergias se pueden dividir en: comerciales, productivas, financieras y de dirección (Ansoff 1976).

Tipos de diversificación

Existen dos tipos diferentes de diversificación. En primer lugar, denominamos diversificación relacionada a la que tiene como objetivo explotar de manera conjunta factores de producción (canales de distribución, mercados, tecnologías, recursos humanos,…) complementando los distintos negocios entre sí, por lo que se busca combinar dos o más actividades que guarden algún tipo de relación. En cambio, la diversificación no relacionada es aquella donde las nuevas actividades no guardan ninguna relación con los productos y/o servicios que ha ofrecido la compañía hasta ese instante.

Riesgos en la diversificación

El objetivo por el que una empresa diversifica su actividad es la creación de valor. Sin embargo, la experiencia empírica nos demuestra que con frecuencia se genera justamente lo contrario.

En la diversificación relacionada existen dos tipos de riesgos:

  1. a) Los activos empresariales no son fácilmente transferibles
  2. b) Los problemas organizativos derivados de la transferencia de recursos pueden ser de difícil solución, sobre todo cuando las unidades de negocio son muy diferentes entre sí. Aparecerán unos costes de coordinación, fruto del mayor esfuerzo que tiene que hacer la empresa para compartir recursos o transferir conocimientos mediante la instauración de mecanismos organizativos válidos.

En cuanto a la diversificación no relacionada, el principal riesgo proviene de la falta  de conocimiento del negocio en el que se quiere iniciar la compañía. Al ser de naturaleza distinta a los existentes hasta ahora, se requerirán  nuevos recursos no disponibles por la misma.

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