Valoración por múltiplos de EBITDA: análisis y ajustes (II)

Como comentamos en el anterior artículo de la serie, el EBITDA es una métrica financiera muy extendida en el marco de las compraventas de empresas. En este artículo veremos:

Ventajas

Inconvenientes

Llegando al EBITDA ajustado

En la mayoría de los casos será necesario hacer ajustes al EBITDA. Los motivos por los que el EBITDA presentado suele diferir (a favor y en contra) del real o ajustado pueden ser:

Artículo relacionado: Ojo a los maquillajes contables en la compraventa de empresas

¿Cómo saber qué ingresos y gastos debe contener el EBITDA y cuáles no?

Por norma general, los ingresos y gastos que deben incluirse en el EBITDA son aquellos que proceden de la actividad habitual de la empresa y tienen el carácter de recurrentes, es decir, se repiten período tras período (no necesariamente año tras año).

Más información: Opinión emitida de la AECA sobre el concepto y uso del EBITDA

En el contexto de la compraventa de empresas, una pregunta útil a la hora de analizar el EBITDA sería preguntarse si el ingreso o gasto en cuestión es independiente del propietario que tenga la empresa. Dicho de otro modo, ¿cambiará con el nuevo propietario?

Ejemplos

Estos son algunos ejemplos de ingresos y gastos que serían objeto de ajuste (algunos podrían incluso ser contingencias fiscales):

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